lunes, 23 de junio de 2014

Silencio





¡Silencio!


     Voces que evocan silencios

            y sonidos abstractos

                    que deforman oídos

                             maldiciendo las entrañas del viento.

 

¡Silencio!

     Voces acongojadas suplican

             en sátiras dudas

                      y sonidos inmolados

                                 desprecian la sabia enraizada

                              
                                        de bosques muertos.



¡Silencio!

     Silencio...

             deja que se apaguen las voces

                     que se atraganten los sonidos

                              que caiga al suelo la pericia desdichada

                                       que no haya más griterío desbocado

                                              que duerman para siempre en el olvido.  

 

Dejad solo al silencio hablar

           y al murmullo de la nada,

                   tan audaz e imprevisible

                           que erguido sobre sus desordenes

                                    improvisó un camino distinto…

                                                               
                                                                                          callado.
 


viernes, 20 de junio de 2014

Triste Figura

En pasos agigantados se enhebraron caminos obsoletos intentando discernir qué clase de olor era aquel que embriagaba cada suspiro que emanaba de dedos insensatos. En aspavientos desorbitados imaginó cómo poder atravesar campos de hierba alta y evitar aquel camino inventado, pese a todo decidió girar la cara en mueca irresoluble y no mirar atrás. El peso de suelas que suelen pisotear pisadas rompió con el ritual constante de aguaceros de media noche. La larga alcoba de trenzados ilarismos desdibujó el entrecejo desvirtuado. Y a la sentencia que trajo el crujir de dientes se le hizo oídos sordos.

 Allá guardado en cajones polvorientos se guardaron sucias prendas desnutridas, sacudida alfombra de ceniza que estrangula los poros que intentaron respirar y en el amanecer nublado de alicaídas miradas se cerraron perspectivas intuitivas y dejaron en tumbas inconscientes todos los instantes que ya no tienen valor.

Voló la noche y los párpados no cejaron en su empeño de abrir todos los sueños, ventanas medio abiertas, brisa pasajera y un susurro que acobardado se pasea por los pasillos quebrando el silencio, respigando las pareces y dejando escrito initium novum…

 



(Cuenta la leyenda que más allá de la memoria y lejos de acordarse de lugares insondables, donde el sol agobiado se abanica boca abajo y Rocinante ya no quiere cabalgar, un caballero surgió con apasionado fantasear. Proclamó su amor incondicional a la más grande dama del Toboso y su fiel escudero con paso firme le siguió. No se halló jamás en su mano el temor y bajo el estruendo arrollador de historias en su mente nunca desfalleció. Aquel de la triste figura que en plausible locura mil senderos trilló, fue dueño y señor de enigmas aun por descubrir…)