lunes, 15 de abril de 2013

LA BATALLA: " Sangre de Tinta " (las espadas en alto, un duelo justo, enfrente mi hermano y de testigo... el papel)

Iyi

Decepcionado por tantas cosas que yo vi, y dolorido por tantos golpes bajos, bajo la atenta mirada de alguien que una vez me dio consejos pensando en mi fracaso. Caigo de bruces, provoco risas en mi honor de quienes antes eran mis amigos.

Pytër Xuan

No hay espanto más grande que el canto desbocado y apesadumbrado de un lamento, de un susurro gritado, de una imagen difusa... y si en el sintáctico beso de tu estrofa debo guerrear, ¡a luchar, a luchar, a luchar!, mejor solo...

Iyi

Quizás la soledad se alíe contigo, si, quizás, pero no importa porque la batalla está ganada... ¡Grita! ¡Grita! Grita aun más fuerte si puedes para hallar consuelo en un suelo vacio de sueños, para encontrar en cada uno de tus puntos, un final inminente. El poder está en mis dedos, en mi corazón la razón y aunque pase el tiempo, un callado jamás será un silencio, sino un bastón.

Pytër Xuan

Nubes por ojos cegados, desdentados por los callados que a gritos golpearon tu rostro, enmarañado por uñas que dejaron cicatrices sin puntos ni comas, pasando hambre en la soledad picaresca de puertas cerradas. He engrandecido talones torcidos para mirar desde lo alto de mi pequeñez, tan absurda como lo que esconde mi cabeza llena de serrín y toques rosas de bondad. Que decís, ¿qué es inútil? ¿Qué ahogarme en una mirada de mares de crisolito es una locura? No dudes que la batalla será mía, la elocuencia subversiva de carisma y toques de rabia que exhalan mis palabras son, amigo mío, detalles... ¡¡Cerca Trova!!

Iyi

Detalles amigo, detalles son los versos que en besos escriben cada uno de mis sentimientos en lo que usted llama en su subconsciente poesía. Pero la poesía que no se escribe, se siente y a veces la escucho tatarear entre mis entrañas: ¡Bésame una vez más! Nubes purpuras en destellos crinados que acarician mis parpados y ciegan los tuyos, porque la cordura fue atada entre locos versos que la muerte recito para aceros morir en su locura. Palabras vacías que ni las hienas pudieron masticar, tan ciegas que no te dejan ver que la batalla murió en su principio, pues antes de incluso comenzar, yo ya había ganado. Marchitos mis pétalos y dulces las espinas que clavadas en tus palabras riegan mi flor, aquella que se da vida a sí misma en su primera letra y que nunca muere, pues infinito es mi valor y eternos mis versos... ¿Aún te crees capaz?

Pytër Xuan

¿Aún osáis desafiarme en duelo? Pues bien, anhelante de derramar tinta está mi acero, ¿creéis que sin ayuda, solamente vos, me podréis vencer? Muchos han querido, y en el primer envite les hice retroceder. He crecido a la sombra de gigantes, he pisoteado uno y cientos e incontables estandartes, corregí por amor y sin soberbia demasiadas almas errantes, ¿y vos pretendéis blandir mis letras?, ¡que su único afán es danzar entre bambalinas!, inocentes, no desean protagonismo, simplemente quieren seguir en su soledad sin que nadie alabe su orgullo, y su casta que vive clavada en trazas de papel roído por sueños rotos y desesperados.

¿Aun creéis que podéis ganar? Quizá a mi sí, no lo niego, yo soy débil, torpe e insalubre de pensamiento, mas las letras que me consumen y me poseen y me llevan dulcemente a la deriva como es el caso, jamás las podréis  vencer, son eternas, son mi vida, son las letras que dibujan en mi rostro el amor al compartir la misma sangre de tinta...

Iyi

Osado es usted al querer competir con un vagabundo que solo posee un ingenio lleno de deseos. No poseo riquezas ni vocabulario excelso como vos, aunque la astucia estudia a mi lado en mi habitación. Sé poco de la escritura, mas solo sé que tiene principio y final. Parece acariciar mi alma con versos que para usted son retóricos, no entiende que se secan mis lágrimas al apretar mi garganta con esas palabras. Más solo tengo miedo a morir al final de ese punto tan triste y alto como una montaña donde las palabras no pueden continuar mas allá, creando en mis alas capaces de darme esa eternidad que solo un niño posee en su sonrisa. ¿Qué esperas de este conflicto? Yo no espero nada, porque en esta espera, disfrutar es mi deseo, soñar escribiendo. Mas al leer no solo leas palabras, porque si al observar contemplas, veras que en algunos de estos versos hay palabras llenas de gracia. Sonría, porque hoy acaba consumido su último suspiro, en cada coma, en cada punto, en cada palabra que aun no he escrito. Mas si acabar conmigo desea, hoy enfurecido seré genio con mil deseos.


Pytër Xuan

Osado fue Furaco al ver a Paca y Tola, las Hienas ahora están vacías, y con el último suspiro mi escritura cuneiforme comenzó a danzar…

En la dicha que es desdicha quedó en entredicha por estar mal predicha por un dicharachero afán, que no es endecha ni estrecha la fecha en la que acecha y sospecha mi balbucear, mas mi desecho tatuado en mi pecho está maltrecho al comenzar a divagar; son estigmas, son mis sueños, y con mil y un trabalenguas te deleito, ¿cuál es el reto? ¿Cuál es la prueba? No soy digno quizá, pero me gusta ver mi alma desfallecer y estremecerse con cada verso en prosa que le regalan tus dedos…

¿Qué yo no puedo contra ti? Respondo como loco: mas sobresalientemente soy yo poeta, en verso mas abundantemente, en prosa lo prefiero, en pasiones a menudo, llegar a la locura frecuentemente, de quien decía ser mi amigo recibí 26 golpes menos 1, de los desconocidos alabado, de los humildes engrandecido, de los ignorantes humillado; he hecho toda clase de poesía para que de algún modo a alguien le guste; ¿que no soy digno? Pues trabajaré en ello arduamente para dignificar mis manos y regar ríos de tinta en papeles inmortales.

Iyi

Oh! Grandilocuentes tus versos escritos en prosa, sin prisa y expresando cada uno de tus sentimientos como si el mañana improvisara en un ayer. Palabras intrínsecas que agujas tejen zurciendo heridas en un panal, donde la miel se mezcla con aguijones infectos de soledad y hace de la locura, vida. Apriscos ciegos de fruta podrida, donde los gusanos nacen y mueren en un mismo lugar... donde los versos son olvido y para otros el bienestar de poder descansar. Evado mis lágrimas y guardo mis sueños en un frasco llamado poesía, donde expreso mi fortuna y me fumo a la soledad esfumada en su locura. ¿Quién soy yo acaso para discutiros su osada prosa? No soy más que un susurro suspirado al viento que sinceramente le pide a las estrellas un camino por el sendero que ha de andar. Seré camino, a veces también seré ciego, para no ver la injusticia de un mundo que un día tuvo vida. Y llegará el día en que mis versos se escribirán solos, porque mis dedos no son capaz de aguantar ni expresar, lo que por ella siento. Consonantes tildadas por injurias que vocales cantaban con infortunio, porque la añoranza fue cariño al mismo tiempo que el olvido cayó en su llanto. No entiendo de palabras pues seca estaría mi alma, yo solo expreso sentimientos y en cada uno de ellos muero porque al comenzar renazco de nuevo. ¿Aun cree que le temo? No lo crea. No tengo miedo, aunque tiemblo entre cajas de tiritas.

Pytër Xuan

Ahora todo encaja, bien guardado, aunque sigo sin entender mi ropa mojada en tendales conspicuos por desfachatez; no obstante, te regalaré mi reverencia rica en tesoros de inestimable valor, pues reconozco que en mis manos quebradas de espanto la risa es efímera y los abrazos escasos.

No suplicaré clemencia, en mi honor de tinta invisible, de versos celestiales, desnudé mi alma purpúrea en acrobáticos vuelos al alba.

No negaré demencia, en mi orgullo indivisible, de cristalinos manantiales, oscurecí el ansia negada en desaforados cantos al alba.

¡He sido vencido! Oh maldita arrogancia, fuiste marchita flor con aires de jactancia,

He sido vencido, han decaído mis dedos, en el instante que mis miedos coloqué en aquel estante

He sido vencido y he caído esclavo de tu hechizo, he sido atormentado con granizo en la tempestad nublada de mi mente

He sido vencido… ¡mas no me he rendido! Correré de estas cadenas tal cual que un bandido, y pese magullado y locuazmente entumecido, conseguiré la libertad de la poesía que persigo.

Iyi

Es cierto. Ahora siento el arte como frio que consume tus dedos... Ahora puedo verte a cuadros sin lienzos que pintar. Hoy, ahora, o donde tú quieras yo estaré, con la misma gracia efímera que pide por favor cada uno de sus sueños. Al fin y al cabo, tan solo soy sal en ese inmenso mar, que lleno de palabras como hienas llenan de carroña su paladar. Escrituras cursivas que curvas marean en las canas de mi vejez, como dunas areniscas que cuevas cavan entre borrachos que nunca se acaban. No sé, quizás fue locura lo que un día empecé, quizás, o tal vez una cordura tan grande que ni las cuerdas pudieron atar. No lo sé, realmente no lo sé. Casquillos encasquillados entre trabalenguas que lenguas mudas tragaron sin más, palabras ciegas que enhebran agujas de veneno en frases de paz.
Mañana quizás sea peor... ¿entonces hoy que haré? Escribir, escribir y escribir, y si me sobra tiempo, escribir...
Estoy en mi cuna adormeciendo tus sueños con nanas que aun no conozco, estoy matando tu ilusión en la trastienda de tu imaginación. Aquí estoy, mírame...
Mira mis ojos sin prisa y lee todos mis pensamientos escritos en prosa que presas sellaron en sobres de lagrimas. El rio avanza fuerte y el pájaro vuela inerte, soy fuego que quema, lluvia eterna... solo soy letras que se unen sin más.

Pytër Xuan

Descuéntame un cuento encantado, uno de incontables sueños, uno que se encuentre escondido entre los espacios en blanco de tus versos, haz un recuento de todos los actos de esta función y de su público, y tenme en cuenta si me encuentras dormido entre lechos húmedos de niebla espesa, de llanto roto en mares vacios, pues soy la sal en las heridas y mi vida es un relato breve pero intenso, son veintiséis muertes en vida, son las migrañas que esgrimo en paredes blanqueadas una y cientos de veces, tengo sueños incumplidos por almohada y aun me sigo arropando en las noches frías con el manto cálido y apagado de aquel que fue el más grande, sigo echando en falta el ingenio de ese genio que me enseñó a caminar; demolido y tamizado para intentar de mi apartar mi estúpida corona, no es grácil danzarina recordar a quien sus pisadas el tiempo borró pero su esencia es la grandeza que sombrea mi aliento ingenuo de años atrás y no es incierto mi acierto infinito que la escuela de dudas me enseñó.

No busco ofuscadas  batallas, quizá nunca valla a ganar ni perder, quizá en estanques empato y me alimente de las migajas, quién sabe qué ocurrirá… no obstante, volveré a izar mi bandera negra, infame escudo de cara al viento donde ondean cabizbajos mis sentimientos, surcaré a la deriva en estos desiertos esquivando los escombros y los líquenes enredados que engendro la mala hierba que se niega a morir; mas no haré pesado mi lienzo, anclado al olvido entre claros segados de pinceladas difuminadas y rasgaré de mi garganta las palabras mudas que nunca dije…

Mundo


Doy vueltas en círculos

en cuadriculas de hormigón

veo gente sin rostro

semblante decaído de brazos

de lazos envueltos, ahogados

risueño egoísmo

que no da tregua

y galopa terca yegua

sin tiempo a descansar.

 

Soy participe de la desventura

que da seguir pisadas

en el vacio solitario de la multitud

caricaturas en peligro de extinción

latitud norte, potencia inusual

que desbocada pasa sin mirar

debajo de sus pies desgastados

de correr con los cordones atados.

 

Estoy frente al silencio

cara a cara con la muerte;

cada día sostengo mi vida

con tiritas puntiagudas

carentes de lo necesario,

tragando con calma

las estocadas que por la espalda

tratan de pisotear

un cambio de camino.

 

Aquel que entre bastidores

siempre quiso aflorar

mas la contienda desmedida

con la que se ducha la injusticia

dio retardo al embargo

que destronó su pedestal.

 

Voy tras la noche

no quiero ver amanecer

no hay reproches en los actos

que malamente se infiltraron

en agónico padecer,

más si cabe seguiré

por la ruta que me dé el sendero sin zapatos,

y parando cada rato

decidiendo que poner

si una tilde, una coma o un punto

cuando halle algún asunto.

 

Mientras tanto olvidaré

que es lo inquietante del olvido

y recordaré algún sollozo acurrucado

en los vestigios desnudos

que doblegaron mi mente,

y abrazaré de cuclillas aquel disparate

que nos llevó a creer

que lo que vemos es lo que hay.

Poesía


Dama sibilina

que entre verso y beso

arrancas el sueño

a estos ojos de mares muertos.

Amante errante

de sintáctica mirada

que derrite cada fuego

en la análoga simiente

de la estrofa de mi alma.

Tu no me engañas jamás,

mas enloqueces mis dedos

en la perturbación constante

de la ansiosa inquietud

que reflejan mi pluma

en aspavientos que esgriman

punzadas mordaces

y danzarinas siluetas,

salpicadas de tinta invisible

que gotea en el papel.

Humedecido este sepulcro

ambiguo y discontinuo

que le da a mis sentimientos escape

a mundos inventados

y a sueños imposibles,

donde me dejo poseer por ti

mi dulce dama

de rimas imposibles

mi amada poesía.